Desde caminatas por glaciares hasta emocionantes sesiones de sandboarding, Perú está lleno de aventuras.
Machu Picchu, el Camino Inca, Lima y Cuzco: estos son destinos indispensables para cualquier viajero que viaja por primera vez a Perú.
Pero aventúrese fuera de los caminos trillados a lo largo de la encantadora costa del Pacífico del país andino y será recompensado con impresionantes paisajes naturales, una deliciosa gastronomía y un rico patrimonio cultural.
Prepárese para dejar las atractivas playas de surf del Pacífico de Tumbes hacia las montañas y los sitios arqueológicos de Chavín en el Parque Nacional de Huascarán. Experimente la emoción del sandboarding en las dunas de Huacachina o sumérjase en el enigmático patrimonio cultural preincaico en Kuélap o las Líneas de Nazca.
Perú es un destino excepcionalmente rico y multifacético, que ofrece vestigios incas y preincaicos, expresiones culturales impresionantes, hazañas aventureras, una belleza natural deslumbrante y una gastronomía extraordinaria”, dice a Euronews Travel Juan Carlos Mathews Salazar, Ministro de Comercio Exterior y Turismo de Perú. “Sin duda, está evolucionando hacia un destino cada vez más atractivo”.
Una serie de elogios afirman esta transformación: Perú fue honrado como el Destino Cultural Líder del Mundo y el Destino Gastronómico Líder del Mundo en los World Travel Awards el año pasado.
Aquí le mostramos cómo experimentar lo mejor que el país tiene para ofrecer.
Realiza avistamiento de ballenas y aves en Tumbes.
Para los amantes de la naturaleza y los animales, una visita a la región de Tumbes en el Pacífico Norte es imprescindible. De julio a octubre, embárcate en un viaje en barco desde Puntal Sal para presenciar el impresionante espectáculo de las ballenas jorobadas dando a luz a sus crías antes de emprender el viaje de regreso a la Antártida.
Tumbes también ofrece espectaculares senderos para la observación de aves, con cerca de 1.900 especies diferentes por descubrir. “Este año, Perú ha visto un aumento en el número de especies de aves: una gran noticia para los amantes de la naturaleza”, dice Mathews Salazar.
Encuéntrelos en el extenso Parque Nacional Cerros de Amotape y los manglares protegidos del Santuario Nacional Manglares de Tumbes.
Impresionantes conjuntos arquitectónicos antiguos: la Ciudad de Barro y Kuélap
Explorar las maravillas históricas de Chan Chan, la ciudad de la arcilla, es una visita obligada en Perú. Situado a sólo cinco kilómetros al oeste de la ciudad costera de Trujillo, este impresionante complejo arquitectónico, construido en 850 a. C., sirvió como capital de la civilización chimú hasta que sucumbió al dominio inca en 1470.
Pasee por el laberinto de construcciones de ladrillos de arcilla secados al sol y maravíllese con los frescos intrincadamente detallados que adornan antiguos palacios y templos.
En el corazón de la región Amazonas, cerca de Chachapoyas, se encuentra la enigmática y antigua ciudad de Kuélap. Ubicada en los Andes nororientales, esta fortaleza del siglo XI se erige como una maravilla preincaica a una altitud de 3.000 metros sobre el nivel del mar. Ascienda en teleférico para disfrutar de vistas espectaculares, pero recuerde reservar con antelación, ya que el acceso es limitado.
Viajando a la región de Huaraz, descubra el Parque Nacional Huascarán en la Cordillera Blanca, un paraíso de lagos glaciares. Con 660 glaciares y 300 lagos dentro del área protegida, el paisaje es un paraíso para los amantes del aire libre.
Elija entre 25 senderos de trekking y 102 rutas de escalada, destacando el Sendero Chavín y el Sendero Lago 69 como excelentes opciones de trekking. En este paraíso natural le esperan ciclismo de montaña, esquí, escalada, caminatas de aventura y turismo cultural inmersivo.
¿Alguna vez has considerado probar suerte con el sandboarding? Experimenta la emoción de descender las dunas en el Oasis de la Huacachina, a sólo cinco kilómetros de la ciudad de Ica en el desierto de la costa del Pacífico. Una excursión de un día le permitirá explorar la pintoresca laguna.
Para una experiencia verdaderamente inmersiva, pase la noche en un campamento en el desierto, contemplando las estrellas y presenciando el impresionante amanecer y el atardecer sobre las dunas. Embárquese en un paseo en buggy por el desierto, llegue a dunas remotas a las que solo pueden acceder estos vehículos todoterreno y finalice practicando sandboard por las laderas a velocidades emocionantes.
Cambie Machu Picchu por lugares incas menos transitados
Contemplar las Líneas de Nazca, uno de los sitios arqueológicos más importantes del Perú, plantea preguntas que invitan a la reflexión sobre su propósito y simbolismo. Este sitio de la civilización preincaica sigue envuelto en un velo de misterio, lo que aumenta su atractivo. Cuando planifique una visita, destine parte de su presupuesto a un vuelo sobre los geoglifos que representan animales, plantas y humanos. Si bien existe una torre de observación, la perspectiva desde un avión proporciona una vista incomparable de estas antiguas maravillas.
Para conocer una visión alternativa de la cultura inca, Mathews Salazar recomienda una visita a Choquequirao, a menudo denominado el segundo Machu Picchu en menor escala.
Aunque se está construyendo un teleférico para acceder en 15 minutos desde la carretera, la soledad actual de este sitio único es una experiencia extraordinaria. Explorar la “cuna de oro” durante el solsticio de verano revela una estructura de escalera iluminada por los rayos del sol. Obtenga información sobre la astronomía y la astrología incas mientras explora esta impresionante fortaleza construida con fines ceremoniales.
Mientras explora estos sitios impresionantes, no olvide saborear los platos regionales y deleitarse con la diversidad cultural de idiomas y personas en cada lugar. Perú, con sus 55 pueblos originarios, 48 lenguas nativas y paisajes singulares, se despliega como una multitud de países dentro de uno.